A continuación se explican qué son los sistemas de ventilación en viviendas y los diferentes tipos existentes.
¿Por qué se debe ventilar una vivienda?
El hecho de ventilar la casa nos aporta salud y evita que podamos desarrollar algún tipo de patología o coger un resfriado, ya que nos ayuda a regenerar el aire. Además, ventilar una vivienda tiene una serie de beneficios ya que renueva el aire del interior. Entre los principales beneficios destacan los siguientes:
- La concentración de dióxido de carbono de la vivienda se reduce.
- Ayuda a reducir el polvo y las partículas en suspensión.
- Permite que entre el sol, que tiene un efecto purificante natural.
- Ayuda a regular la humedad del interior de la vivienda.
El aire, si no es renovado habitualmente, se convierte en aire de mala calidad, pudiendo ocasionar problemas tanto a la vivienda como a las personas que habitan en ella.
Una mala calidad del aire puede formar gérmenes y bacterias en el ambiente, lo cual puede llegar a afectar tanto a la productividad de las personas como a su salud, llegando a ocasionar problemas respiratorios.
También es importante que este se renueve para que no se mezcle con humos, vapores y humedad.
Ventilación natural
La ventilación natural en viviendas consiste en permitir la entrada y salida de aire sin el uso de ningún sistema mecánico. Este tipo de ventilación suele ser el más común puesto que solo requiere abrir las ventanas o puertas dela vivienda permitiendo que el aire fluya por el interior.
El sistema de ventilación natural no supone prácticamente ningún coste y es una acción muy sencilla de realizar. Por el contrario, con este sistema no se puede controlar la cantidad de aire ni la velocidad con la que entra en la vivienda. Este tipo de ventilación puede influir negativamente en la temperatura de la vivienda si no se hace durante un periodo de tiempo apropiado.
Ventilación cruzada
Este tipo de ventilación se da cuando se producen corrientes de aire. Estas pueden generarse abriendo puertas o ventanas en posiciones opuestas. La mejor manera de realizar este tipo de ventilación es teniendo dos aberturas, cada una con la orientación a una calle. Las entradas de aire provendrán siempre de las fachadas norte, mientras que la extracción de aire se realizará por las fachadas que den al sur.
Este tipo de ventilación es más eficiente que la ventilación natural simple. Se pueden encontrar los mismos problemas que en la ventilación natural puesto que el mecanismo es el mismo.
Ventilación forzada
La ventilación forzada, también conocida como ventilación mecánica de doble flujo, consiste en que, por una abertura entra aire y, a través de conductos y elementos mecánicos, es conducido hasta las estancias más secas de la vivienda. Una vez ventilada toda la vivienda, el aire es conducido hacia una de las estancias más húmedas, y es ahí donde, por la abertura de salida, el aire vuelve al exterior, renovando el aire de toda la casa.
Este sistema de ventilación en viviendas es considerado como un sistema de ventilación pasivo, con el cual podemos conseguir una gran eficiencia energética. Este forma de ventilar permite obtener una gran hermeticidad y aislamiento tanto térmico como acústico. Por el contrario, este sistema tiene un coste elevado puesto que requiere de una instalación específica.
Hasta aquí se han explicado qué son los sistemas de ventilación en viviendas y los diferentes tipos existentes. Si te ha gustado esta noticia visita el blog para seguir informado de las últimas noticias publicadas.
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